21/9/10

La vergüenza del vikingo

En su aislamiento del continente, los suecos se deben de pensar que son los únicos que no dedican más que miradas de aprensión al último elemento de un plato: sea aceituna, galleta o pedazo de bizcocho; o que se les ocurrió a ellos primero eso de comenzar a dividir el último elemento en fragmentos cada vez más y más pequeños... y así te lo señalan, creyéndose muy hábiles e ingeniosos por saber reírse de esa costumbre única suya, sin saber que no hacen más que plagiar a los gallegos, que adueñarse de una particularidad de la especie humana no sólo ampliamente glosada, sino rimada en nuestro suelo patrio...

2 comentarios:

Javi Pato dijo...

jajajaj, que ida de pinza. Muy bueno el monologo de Piedrahita por cierto, y tu entrada claro. xD
por cierto no ha habido elecciones por ahí? No da para algún post?

Antón Pérez dijo...

¿No hablo apenas de política española en el blog... y quieres que empiece ahora con la sueca? ¡Qué pereza, por favor...! Me da que va a ser que no :-)
El monólogo de la croqueta es monumental; por eso lo puse.