En Madrid...

... pero con la cabeza en Santiago; así me pasaré hoy el día. Me hubiera encantado estar allí con el Papa (o mañana en Barcelona), pero esta imprevisible vida de becario no es muy comprensiva con eso de hacer planes a largo plazo... de hecho estuve a punto de pasar un fin de semana “a la sueca” (esto es, en la Facultad), del que me salvó el que ayer saliese todo inesperadamente bien en el laboratorio. En fin; habrá que conformarse con entrar cuando se pueda en la web oficial, donde irán retransmitiendo todo en directo.
Tenemos visita en casa, de todas maneras: mi hermana Alda, mi cuñado y mi sobrina (porque es una sobrina, que crece a buen ritmo, deseosa de asomar la cabeza allá por febrero) llegaron ayer por la noche para pasar aquí el fin de semana. Y qué diferencia (no me cansaré de dar gracias) con el otro piso; en el momento en que esta entrada programada se autopublique yo estaré apaciblemente dormido en la misma cama que ayer, y no en un colchón hinchable en el salón...