1/12/11

“¿No quieres charlas? ¡Pues tres tazas!”

Ya os he comentado que aquí menudean las conferencias, journal clubs, lab meetings y demás historias en las que entretenerse e incluso aprender algo; pero esta semana ha desde luego batido récords: tras el evitable par de seminarios de inmunología pura y dura del lunes, todo el martes hemos tenido un simposio sobre las estrategias que siguen los parásitos para optimizar el aprovechamiento de sus hospedadores... bueno, ha estado bien en general; y además el precio (gratis, jeje) incluía pausas-café, comida y picoteo post-simposio. Solo tengo una queja, que es que al registrarse por Internet preguntaban en un cuestionario si alguno tenía especiales requerimientos alimenticios. Contesté diciendo que, si era posible, no me importaría comer langosta; y los organizadores ni se dignaron en contestar... Ayer por último, después del journal club matutino, tuvimos por la tarde una charla deliciosa que versaba los distintos sistemas de emparejamiento de los peces del género Rhodeus: unos pequeños peces euroasiáticos de agua dulce que desovan ¡dentro de las almejas de río!, donde sus huevos permanecen ventilados y protegidos. El servicio no es en balde, de todos modos, ya que cuando los alevines abandonan la almeja se llevan consigo, adheridas al cuerpo, las pequeñas larvas parásitas de la almeja, que consiguen así dispersarse.

Dije arriba “por último”, y dije mal; ya que dentro de unas horas nos toca “charlar” a Sofía y a mí; para contarles a los del grupo que nos ha acogido aquí de qué van nuestras tesis respectivas, y darles mucha envidia con las fotos del trabajo de campo. En fin, si les apetece venir a alguno, en Madrid estaremos encantados de acogerles...

2 comentarios:

A. Lázaro dijo...

¿Desde cuando eres tu tan descaradamente graciosillo...? ¿Langosta?

Mucha suerte con vuestras charlas, ya nos contarás qué tal han ido.

Antón Pérez dijo...

Han ido bastante bien, gracias :-) Lo de gracioso me ofende que hagas como que lo descubres ahora... ¬¬