Las clases de teoría del curso terminaron como tales el miércoles por la mañana; y desde entonces nos hemos dedicado a trabajar con nuestros datos, poniendo en práctica lo aprendido con el apoyo del profesor. Cabría preguntarse si dos días efectivos de docencia valen los 400 € que pagamos por ellas; pero bueno, en cualquier caso algo he aprendido. Y si los resultados no son espectaculares es más por culpa de mis parásitos (como siempre) que por la mía...
Esto es un Haemoproteus parabelopolskyi; a estas alturas ya deberíais saberlo... Su linaje H-SYAT01 es uno de los parásitos que detecto con mayor frecuencia.
Y este el mapa de idoneidad (de azul -poca- a rojo -elevada-) de la presencia de H-SYAT01 en la Península (cada punto rojo es una localidad de muestreo). Maxent es lo que tiene: los datos serán mejores o peores, pero los mapas que genera son bonitos.
Estableciendo un valor umbral mínimo, puede convertirse el mapa continuo de arriba en uno de ausencia/presencia potencial; una especie de mapa de la distribución putativa del parásito atendiendo a las variables ambientales. En realidad, y al ser el parásito tan común, lo que el mapa refleja es en gran medida la distribución peninsular de la curruca capirotada... pero no voy a contaros más; el resto, cuando lo publique :-)
2 comentarios:
Jejeje. Me molan mucho los mapas, estoy por hacer que me apañes uno de Galicia para mi tesis. jeje
De todas, una pena q las Baleares sean tan azules dado el caso no? O mismo los Pirineos, jeje.
Lo de distribución putativa... es curioso
Bueno, una pena, una pena... los datos son los que son; los Pirineos aparecen tan azules por cuestiones de altitud y frío. Las islas Baleares directamente no están considerada en el modelo, pero olvidé recortarlas del mapa :-)
Y si quieres este verano miramos de hacer un mapa así con los bichos de tus corzos, no sería ningún problema... ya lo vamos viendo en agosto.
Publicar un comentario