- La segunda rareza que veo tras el porrón acollarado de Valdoviño, un precioso cisne cantor Cygnus cygnus, acompañado de decenas de cisnes vulgares C. olor.
- La serreta mediana Mergus serrator
- El bisbita costero Anthus petrosus
- Y el mejor de todos sin duda por lo inesperado: El falaropo picogrueso Phalaropus fulicarius. Estábamos en la playa del Camello buscando correlimos oscuros, cuando de repente veo algo parecido a un correlimos tridáctilo que se posa en unas rocas. Me acerco y, para mi sorpresa, ¡se echa a nadar!... “¡Javi, corre!; ¡¡¡UN FALAROPO!!!” Javi llegó a tiempo de ver cómo el bicho se alejaba volando... Pero por suerte volvió al cabo de un rato, y pudimos disfrutar de él a placer; y hasta grabarlo.
A estas alturas de la temporada este bicho debería estar en el Golfo de Guinea; o en todo caso mar adentro, con lo que se comprende nuestro entusiasmo, máxime cuando ya lo habíamos buscado muchas veces sin éxito...
2 comentarios:
I was there! Jajaja! Que odiosa me resulta mi voz cuando la oigo grabada... lo que no está tan mal es mi estrofa improvisada xD
Falaropo oeeee
ni Santillana
ni Daimiel
Falaropo oeeee
Falaropo en Santandeeeeer
chimpun
Que suerte tuviste que yo no estuviese allí, seguro que se escapaba el Falaropo y yo sin tener culpa...¡Ya te dije que no te acercases, ya me fastidiaste!.No te enfades que cuando vengas te tengo preparados muchos, muchos...bichitos pero sin plumas.Besiños.Mfr
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