18/6/11

El difícil equilibrio entre docencia e investigación

El artículo del Dr. Artal que enlazo es interesante en sí mismo, y más aún por el debate que, cosa rara, ha generado entre los lectores de Madri+d, poco dados a comentar las noticias. Incide el texto en la baja cantidad y calidad global de la producción científica de las universidades españolas, que las hace ocupar puestos mediocres en las clasificaciones internacionales. Buena parte de los comentaristas argumentan, sin embargo, que el objetivo principal de la Universidad es formar a los futuros profesionales y que la de docente debería ser la principal tarea de su personal, que para investigar está en CSIC. Refutan otros esto arguyendo que mal podrá alguien enseñar lo que no sabe, investigación incluida; y achacando estos comentarios a profesores de la vieja escuela, contratados por procedimientos más sencillos (o... “dudosos”) y que se contentan con repetir año tras año los mismos contenidos a sus alumnos...
Posturas difícilmente reconciliables, pero que admiten muchos matices y puntos intermedios. Y en algún lugar me encuentro yo, más cerca de los primeros que de los segundos, aficionado a la investigación y apasionado de la docencia. Justo al contrario de lo que parece ser el sentir general en el gremio, para mí la enseñanza es la meta, y no el estorbo; y me “enfrento” a un sistema que valorará mi idoneidad sobre todo por mi producción científica... a ver en qué para todo, a la vuelta de los años.

1 comentario:

Javi Pato dijo...

Yo opino igual que tú. Aquí en mi facultad hay muchos rémoras acomodados desde hace siglos, departamentos con un gran potencial en los que se investiga sólo al nivel de quejarse de que tienen q dar x horas de docencia. Horas aún encima que no se molestan en renovar ni currar año tras año... La investigación no pued depender únicamente de empresas privadas, al igual que muchas otras cosas...