14/1/15

¿De dónde venía el cormorán?

 Los bichos no se anillan porque sí. Anillar un animal sirve para individualizarlo, eso lo primero: anillar por ejemplo las currucas nos sirve a nosotros para, en caso de recapturarlas, evitar tomar muestras repetidas de un mismo ejemplar... o en el caso de recapturarlas, completar la información que tengamos sobre ella: saber cuánto ha sobrevivido, cuánto se ha movido, si han variado los parásitos que presenta... lo que se nos ocurra, vaya.
Aunque evidentemente para sacar sangre a un pájaro hay que manipularlo, en las especies suficientemente grandes pueden colocarse (a mayores de las anillas metálicas, que en principio deberían durar siempre) marcas de lectura a distancia, que permiten mientras duren identificar al ejemplar sin necesidad de capturarlo. Os he comentado en ocasiones anteriores los datos de anillas de PVC que he leído en gaviotas, y pego ahora debajo el historial del cormorán que vimos el jueves en Santoña, que muy amablemente me ha mandado su anillador a vuelta de correo:

Como veis, el bicho no se mueve mucho que digamos del puerto de Santoña, donde ya fue fotografiado en su primera observación (si os fijáis se ve el avance del desgaste en los bordes pálidos de las plumas juveniles de las alas). Según Álex, las anillas le pesan tanto al bicho que no consigue moverse del sitio...

Pero no, sí que se ha movido, aunque poco: desde la colonia donde nació a Santoña hay 23 Km en línea recta. Que no es tanto, pero tampoco los cormoranes moñudos son de dispersarse mucho... o bueno, eso se pensaba precisamente hasta que se empezaron a marcar, resultando que a fin de cuentas sí hay un buen trasiego anual de cormoranes a lo largo de la costa cantábrica... No dejéis las lecturas de anillas sin tramitar, ea, que ya veis que sirve para mucho :-)

2 comentarios:

Javi Pato dijo...

Me acordé de tu entrada al ver esto...

en fin..

https://www.facebook.com/PartidoAnimalista.PACMA/photos/a.82584226684.94750.72181181684/10152469321266685/?type=1&theater

Antón Pérez dijo...

Ya lo había visto, ya...