Bueno; tres semanitas que me quedan para volver a casa... y ganas no me faltan; que además vuelve a llover. Tenemos el otoño encima ya, y me da que ha llegado para quedarse...
Finalmente ayer, tras darle duro al laboratorio durante una semana, tuve que tirar la toalla: hasta donde llegan mis conocimientos soy incapaz de diseñar reactivos específicos para mis linajes de parásitos; a lo más que alcanzo es a conseguir que algunos detecten sólo 2 ó 3 de ellos. Y bueno, como menos da una piedra, pues en estos días que me quedan me dedicaré a reanalizar todas mis muestras con esos reactivos “casi específicos”, de forma que si quedan por ahí infecciones ocultas de ésas tengo alguna posibilidad de detectarlas. Va a ser mucho trabajo, muchos análisis me temo que para pocos resultados; pero no me agobia demasiado, ya que es algo que aunque no acabe aquí sí puedo seguir haciendo en Madrid tranquilamente.
Además, que aquí las cosas llegan a torcerse de la manera más inoportuna: ayer, sin ir más lejos, un simulacro sorpresa de incendio y desalojo del edificio, con lo puesto... que no sé si es peor quemarse o morir congelado en la calle de manga corta. De momento aquí ando, moqueando generosamente sobre el teclado y las muestras...
Finalmente ayer, tras darle duro al laboratorio durante una semana, tuve que tirar la toalla: hasta donde llegan mis conocimientos soy incapaz de diseñar reactivos específicos para mis linajes de parásitos; a lo más que alcanzo es a conseguir que algunos detecten sólo 2 ó 3 de ellos. Y bueno, como menos da una piedra, pues en estos días que me quedan me dedicaré a reanalizar todas mis muestras con esos reactivos “casi específicos”, de forma que si quedan por ahí infecciones ocultas de ésas tengo alguna posibilidad de detectarlas. Va a ser mucho trabajo, muchos análisis me temo que para pocos resultados; pero no me agobia demasiado, ya que es algo que aunque no acabe aquí sí puedo seguir haciendo en Madrid tranquilamente.
Además, que aquí las cosas llegan a torcerse de la manera más inoportuna: ayer, sin ir más lejos, un simulacro sorpresa de incendio y desalojo del edificio, con lo puesto... que no sé si es peor quemarse o morir congelado en la calle de manga corta. De momento aquí ando, moqueando generosamente sobre el teclado y las muestras...
2 comentarios:
Jeje. Anda que vaya estampa imaginar la situación del "simulacro" en cuestión con la alarma sonando y filas de gente saliendo para pelar de frío fuera. Jajajaja
Ya ves; aunque eso de fila... mucha fila no es que se formase. Por lo menos toda la gente hizo caso y salió; no como en Biología, que sonaba la alarma y decía el profesor: "Vaya, la alarma; debe de ser un simulacro. Así que seguimos, que si pasa algo de verdad ya vendán a avisarnos..."
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