19/4/08

Gaudium magnum

Tres años ya, y lo recuerdo como si fuese ayer. El Domingo de Pascua lo vi por última vez en la Plaza de San Pedro, el miércoles apareció por última vez en público y el sábado 2 de abril, sólo seis días más tarde, la Virgen cerró sus ojos al caer la tarde...
Un par de semanas luego durante las que no se hablaba de otra cosa, y normalmente para decir barbaridades. Me habría gustado quedarme en La Estila, haciendo que hacía algo y atento de reojo a las campanas de la Catedral y a la tele, por si las moscas; pero en 3º de Biología yo era monitor de prácticas de Fisiología Animal, y aquel miércoles de 2005 me tocaba currar. Confieso ahora que, durante aquella sesión de prácticas, tanto me debieron de absorber las explicaciones acerca del funcionamiento de los pulmones que se me fue el tema del día de la cabeza. Tanto mejor así; saliendo de prácticas junto con Óscar, compañero de toda la carrera y monitoreado de aquella tarde, me crucé con Pope (nunca tan al pelo le vino el mote) por los pasillos de una Facultad casi vacía... “¡Benedicto XVI, Benedicto XVI...! ¡Ha salido Ratzinger...!” Y un abrazo, y cara de felicidad, y más abrazos, y corriendo a casa a ver lo que os he puesto en el vídeo de abajo, oyendo sin escuchar las tonterías que decía Óscar acerca de Ratzinger Z y demás zarandajas que llevaban días repitiendo los tertulianos enteradillos de medio mundo...
¡Y qué buen Papa, Señor...!

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